miércoles, noviembre 04, 2009

COMPARTIENDO LA VIDA EN AMOR

El Amor en la vida humana parece estar rodeado de una necesidad imperante de no estar solo, rodeado de la necesidad de compartir los momentos de felicidad, de tristeza o dolor o para la unión física. La necesidad es algo humano, sin embargo en el verdadero amor no hay necesidad de nada, cada uno sabe que es amado en cada instante y momento de la vida. Implica compartir desde el Espíritu que se expresa en el dar, en el bien-estar del otro simplemente como una entrega incondicional.
Una incondicionalidad que se manifiesta por la presencia al lado de la pareja que a momentos puede ser presencia física o presencia de lejos pero que te envuelve en un abrazo amoroso como un rayo de luz que sale del corazón junto con toda tu aura y que alcanza al otro en un abrazo sublime, o una presencia con el pensamiento – sentimiento de amor emanado del corazón espiritual elevando una plegaria para que te sienta que estás con el o ella a través del Padre Amado o Fuente de Ser Divina o como le quieras llamar.
Un amor que comparte es el que sabe escuchar atento al que te está hablando sobre una vivencia, circunstancia, con una atención que logra contactar al otro en lo más profundo de su ser, sintiendo o más bien percibiendo sus más profundos deseos, emociones, dolor, tristeza, alegrías, logros en fin tantas cosas que logra el escuchar con Atención Total, así es también el Amor en la Totalidad.
Compartir la vida es caminar juntos haciendo cosas juntos, comprendiendo, expresando como lo ve uno y haciendo único con la esencia de los dos eso que quieren hacer los dos sin imponer, sin controlar, con toda apertura mental y con el corazón abierto al Amor.
En una pareja no es necesario que exista percepción alguna de si me protege, si le importo o no, si se ocupa de mi o si le gusto como soy. No mi querido hermano, en el Amor Verdadero esto está dado, aunque sea nuevo para alguno de ustedes. El Amor es todo eso: libre como el viento que envuelve cuando sopla y es entonces cuando sabes que Es, el Amor Mismo.
El Amor implica primero Amor Centrado en ti que quiere decir que el Amor profundo y verdadero mora en Ti. No es que lo encuentres, es que reconoces que el Amor siempre ha estado ahí cuando tomas consciencia de esto. Entonces tu corazón se abre y el Amor se expande como esa fuerza sutil que te envuelve como lo hace una flor cuando percibes su aroma. Aroma que siempre está ahí pero hasta que tomas consciencia de que siempre está expeliendo su aroma, te llena encontrando y sintiendo la Belleza.
Esto mi querido hermano es contactar con el otro, porque contactas la Belleza del Ser que son todos y cada uno de ustedes. Pero ustedes se resisten a su encuentro con la Belleza y la Verdad de las cosas de la vida, de tus hermanos, de los seres vivos que existen en tu planeta.
Contactar es Ser Uno con el Otro, no existe ninguna imagen sobre el otro ni del otro sobre ti, es Ser en la Luz y conocerás lo que el otro Es porque es lo que Es y tu te reflejas en el otro y sabes quién eres y quienes son los dos, un mismo Espíritu en el Todo y una misma Esencia en Espíritu manifestado en un Espíritu Individualizado.
Entonces mi hermano sólo así es como sabrás quien es o quien no es una compañera o un compañero en tu vida, con quien ir juntos en la ascensión a la consciencia desde tu caminar en la Tierra. Y no me refiero nada más a la relación entre un hombre y una mujer como pareja.
Esto que te he dado es la única forma en que se transformarán en una hermandad de amor que los llevará a la Paz en lugar de perpetuar el conflicto.
Que la Paz y el Amor se expanda en tu vida y la de todos tus amados hermanos.
María